Eliminación del programa de afectividad y sexualidad integral y el protocolo de atención del bullying contra la población estudiantil LGBT+
esde el CIEM de la UCR, expresamos nuestro más profundo rechazo ante la decisión del Consejo Superior de Educación del MEP de eliminar tanto el Programa de Afectividad y Sexualidad Integral, como el Protocolo de Atención del Bullying contra la Población Estudiantil LGTB.
Llama la atención que en un momento clave para las elecciones del 2026, se realice un cambio de este tipo, sin fundamento técnico, sin tomar en cuenta datos, ni escuchar al estudiantado que cursa la secundaria, ni a quienes ya recibieron los contenidos sobre afectividad y sexualidad.
Al suprimir el Programa y el Protocolo se violenta el cumplimiento de normas internacionales, como la CEDAW, que aboga por cambiar prejuicios y prácticas cimentadas en estereotipos que afectan negativamente la dignidad humana. Esta decisión, además, va contra los principios del Código de la Niñez y la Adolescencia, que obligan al Estado a propiciar educación sexual en los programas educativos.
El Programa de Afectividad y Sexualidad contiene información para que las personas adolescentes comprendan la importancia de cuidar sus cuerpos, respeto a la diversidad y conocimiento de sus derechos y deberes. Los contenidos de este Programa son centrales para prevenir: las relaciones impropias, abusos sexuales, embarazo adolescente e infecciones de transmisión sexual.
La eliminación del Protocolo de Atención del Bullying contra la Población Estudiantil LGTB constituye un retroceso, este instrumento ha sido fundamental para evitar la discriminación y prevenir actos de violencia hacia las personas estudiantes LGBTIAQ+ en los Centros Educativos del MEP. Este protocolo plantea una serie de pautas de respuesta inmediata para intervenir en una situación de bullying, dentro o fuera de los centros educativos. Cabe preguntarnos ¿qué pasará ahora ante situaciones de acoso escolar? ¿qué mensaje está dando el MEP al estudiantado y a la sociedad en general respecto a la prevención y atención de la violencia?
Instamos al CSE a revocar esta decisión, considerando implicaciones negativas que acarreará el mantenerla, no solo para la población estudiantil, sino para la sociedad costarricense en general.